Administracion de Empresas

jueves, 24 de marzo de 2011

Explicación Keynesiana de la inflación

En el enfoque keynesiano, la variable clave es la demanda agregada, de forma que si la demanda total excede la producción, tendrá lugar un aumento en el nivel de precios. Desde una perspectiva keynesiana, la incidencia sobre los precios de un incremento de la demanda agregada dependerá de la situación de la economía, esto es, del grado en que la demanda de bienes y servicios sea mayor que la oferta.

De este modo, si partimos de una situación en la que todos los recursos están empleados y se produce un aumento en la demanda agregada, los precios aumentarán. Sin embargo, si hubiera una gran cantidad de recursos desempleados, la relación entre demanda agregada y precios no será tan estrecha, pues el aumento
de la demanda podría compensarse con un aumento de la oferta. Esto dependerá de la disponibilidad de mano de obra y de la existencia de capital.
La intensidad del aumento de los precios dependerá del tamaño del incremento de la demanda agregada y de lo próxima que se encuentre la economía al Pleno Empleo.
El Pleno Empleo se define como aquella situación en la cual todos los factores disponibles están empleados, es decir, no existe desempleo, a excepción del friccional.
Si la economía está muy alejada del pleno empleo, las empresas pueden contratar más trabajadores y comprar más maquinaria y equipo para producir más bienes, siempre que haya demanda. En esta situación, un aumento de la demanda no debería generar mucha inflación. Pero si la economía está próxima al pleno empleo o existen dificultades para la contratación de nuevos factores, las empresas no tienen capacidad para contratar más factores productivos y, en consecuencia, no podrán producir más bienes y servicios. En estas circunstancias, cuando tenga lugar un aumento de la demanda se generará un incremento de los precios, mientras que la producción permanecerá prácticamente inalterada.

miércoles, 23 de marzo de 2011

La Inflación de demanda

Para algunos autores, el factor clave para explicar el crecimiento de los precios reside en la evolución de la demanda agregada. Si los distintos sectores de la economía planean, en su conjunto, unos gastos que superan la capacidad de producción de la misma, esos planes no podrán cumplirse de la forma que fueron proyectados.
La consideración de que la demanda es el factor determinante en la inflación es algo en lo que están de acuerdo tanto los monetaristas como los keynesianos, pero ambos divergen, sin embargo, distintas explicaciones acerca de las causas que provocan dicho comportamiento de la demanda.
Explicación monetarista de la inflación En el contexto monetarista, la causa que explica el comportamiento de la demanda agregada es el aumento de la cantidad de dinero por encima del crecimiento de la
producción. Los defensores de la tesis monetarista mantienen que sin un aumento de la cantidad de dinero ninguna de las otras causas propuestas pueden llevar a alzas continuadas y sostenidas en los precios. Asimismo, mantienen que el aumento de la cantidad de dinero de es condición suficiente para que aparezca la inflación y que los datos confirman que una elevación sustancial del nivel general de precios durante un período suficientemente largo va acompañada de una elevación de la cantidad de dinero disponible por unidad de producción.
Los monetaristas defienden que la causa que explica el comportamiento de la demanda agregada y, por tanto de los precios, es el aumento de la cantidad de dinero. Para entender el argumento monetarista hay que pensar en una economía simple en la que la cantidad de dinero en circulación, en forma de billetes y
monedas, sea de 1000 pesos, y, además, en la que no exista dinero bancario y que el único tipo de bienes que se pueda comprar con dinero sea el vestuario.
Supongamos también que cada año se producen 500 vestidos y todos ellos se venden, pero una vez vendidos no se revenden. Bajo estos supuestos resulta que el precio de cada vestido es 2 pesos. Ahora, imaginemos que el Banco Central emite 2000 pesos. Si el nuevo dinero también se dedica a la compra de vestidos resultará que el nuevo precio de éste será de 4 pesos por unidad. Así pues, como consecuencia de haberse doblado la cantidad de dinero, los precios también se han duplicado.
Los monetaristas defienden que lo que es cierto en el ejemplo simplificado también
lo es en el mundo real. Argumentan que la inflación está motivada por aumentos en la oferta de dinero por encima del producto real de la economía. Por ejemplo, si la cantidad de dinero aumenta en un 10% y el producto real de la economía (medido por el PIB) permanece inalterado, la inflación será de un 10%.

martes, 22 de marzo de 2011

Causas de la Inflación

Para explicar el origen de la inflación se dispone de dos bloques de teorías:
Inflación de Demanda
Inflación de Costos

lunes, 21 de marzo de 2011

El Deflactor del PIB

Para poder hablar del concepto de Deflactor se debe hacer la distinción entre cantidades nominales y cantidades reales. En particular el PIB nominal es el producto interno bruto al cual no se le ha eliminado el efecto de los precios y el PIB real es aquel que sí se le ha eliminado el efecto de los precios. Pues bien, la
distinción entre el PIB nominal y el PIB real da el segundo indicador más utilizado en la inflación, esto es, el deflactor del PIB.
El deflactor del PIB está dado por el cuociente entre las magnitudes nominal y real


El deflactor es un índice de precios con el que se convierte una cantidad nominal a otra real, esto es, la magnitud nominal se deflacta separando la variación debida al crecimiento de los precios de la atribuida al aumento de los factores reales. Dado que el PIB es una magnitud básica de la actividad económica, su deflactor es el índice de precios de mayor cobertura, y el que más se acerca al concepto de índice
apropiada para indicar la evolución de todos los precios de los bienes y servicios de la economía.
Así, la inflación medida por el deflactor del PIB es:

domingo, 20 de marzo de 2011

Medición de la inflación

La medición de la inflación tiene como objetivo medir el crecimiento mediante la evolución de un índice de precios. Son dos los que suelen utilizarse: el Índice de Precios al Consumidor y el Deflactor del PIB.
Índice de precios al consumidor De los índices que pueden tomarse para representar el nivel general de precios, el mas utilizado es el Índice de Precios al Consumidor (IPC). El IPC es una medida del nivel de los precios en un momento determinado. Se basa en los precios que poseen el conjunto de bienes y servicios contenidos en una canasta de compra considerada representativa, es decir, recoge algunos productos que las familias compran normalmente como alimentos, vestuario, calzado, vivienda, educación, etc.
El índice se obtiene realizando un promedio ponderado de los precios de cada uno de estos bienes y servicios, según la importancia relativa que poseen en el conjunto global de la canasta de compra.
Así la inflación medida por el IPC se puede definir como:


El IPC permite conocer la evolución de los precios de los bienes y servicios que generalmente adquieren los consumidores. Refleja de forma apropiada cómo se ha encarecido la vida, pues indica el dinero que hace falta para mantener el nivel de vida anterior.

sábado, 19 de marzo de 2011

Hiperinflación

En la hiperinflación los precios suben un millón o incluso un billón % anual. Durante una hiperinflación el crecimiento de dinero y el crédito llega a ser explosivo, es decir el efectivo en circulación aumenta astronómicamente, así la demanda real de dinero disminuye radicalmente, la gente se deshace del dinero lo más rápido posible por su pérdida de valor y los precios relativos se vuelven muy inestables.
Algunas hiperinflaciones históricas que son relevantes destacar son a fines de 1700 en EE.UU. y Francia; en la U.R.S.S. y Austria después de la primera guerra mundial; en Hungría, China y Grecia después de la segunda guerra mundial.

viernes, 18 de marzo de 2011

Inflación Galopante

Esta inflación varía entre dos y tres dígitos, entre 10% a 30% anual en algunas naciones industriales e igualan el 100% anual o más en países crecientes, es decir el aumento de los precios sube rápidamente, causando desconfianza en la población, la cual compra bienes y servicios para evitar precios aún más altos; la especulación de bienes raíces aumenta; los negocios de inversiones se concentran a corto plazo; los incentivos para adquirir ahorros, pólizas de seguros, jubilación y las obligaciones a largo plazo se reducen; los gobiernos rápidamente expanden gastar en el anticipo de rentas infladas; y las naciones exportadoras sufren desventajas comerciales competitivas lo que los fuerza a volver al proteccionismo y controles arbitrarios de moneda.
Algunas economías con una inflación del 200% anual consiguen sobrevivir, sin embargo, tienden a generar grandes distorsiones económicas, ya que sus pobladores invierten en otros países y la inversión interna desaparece.

martes, 1 de marzo de 2011

Inflación Moderada

En este tipo de inflación, los precios tienden a subir muy lentamente, lo que provoca que la población se sienta confiada, manteniendo activo su dinero en efectivo o  firmando letras, cheques o contratos a largo plazo. El precio que paga o recibe un individuo por un bien, ya sea por medio de letras o contratos, no se alejará
demasiado del precio inicial, es decir, el precio final será el real. En cambio no se invertirá en activos reales en lugar de activos monetarios, porque cree que sus activos monetarios conservarán su valor real. En este tipo de inflación se observan tasas de interés anual de un sólo dígito.